Aunque la votación terminó con una amplia mayoría a favor, surgieron cuestionamientos que podrían derivar en reclamos ante la Justicia.

En total, 85 socios votaron a favor de la aprobación de las cuentas, mientras que 23 se manifestaron en contra, reflejando así una amplia diferencia pero también la existencia de un sector opositor activo y crítico.

Uno de los principales referentes de la oposición al actual presidente Eduardo Larrosa, Leonardo Orellana, adelantó que pedirán la anulación de la asamblea, argumentando que el Tesorero que avaló el balance fue, a la vez, quien debía fiscalizar la correcta convocatoria del encuentro. Además, Orellana no descartó realizar una presentación judicial y anunció que en los próximos días formalizará sus objeciones ante la Comisión Directiva.

Durante la jornada, otros socios también expresaron reparos respecto al balance aprobado, señalando la falta de documentación respaldatoria que diera mayor transparencia a las cifras expuestas.

A pesar de las tensiones, el presidente Larrosa valoró positivamente el desarrollo de la asamblea, subrayando que, más allá de las diferencias, el clima de respeto entre los asistentes fue el tono dominante. Asimismo, destacó la mayoría holgada con la que se validaron los números correspondientes al último año de gestión de Hernán Romero, quien había presentado su renuncia junto con otros dirigentes como el Tesorero y el Vicepresidente Primero.

La vida institucional de Argentino de Quilmes sigue movida, con un oficialismo que consiguió el respaldo formal en asamblea, pero también con una oposición que promete seguir dando pelea dentro y fuera de los ámbitos del club.