La investigación comenzó en 2021, cuando un organismo internacional especializado en la protección de la infancia denunció la circulación de material ilegal que involucraba a menores de 13 años. Un allanamiento realizado en la vivienda del comerciante, ubicada en la calle 110 de Berazategui (cerca de la avenida Belgrano), permitió a la Policía secuestrar su teléfono celular, donde se encontraron 38 archivos de video y 15 imágenes explícitas de abuso sexual infantil.

Durante el juicio, la fiscal Mariel Calviño presentó pruebas contundentes que demostraron que el acusado no solo poseía el material, sino que lo distribuía desde su cuenta de Messenger. Las imágenes mostraban a menores en situaciones de abuso, lo que llevó al Tribunal a emitir un veredicto condenatorio.

En la sentencia, emitida el 18 de septiembre por el Tribunal Oral en lo Criminal Nº5 de Quilmes y firmada por el juez Gustavo Darío Farina, se condena a S.R.J. a 4 años de prisión por resultar autor penalmente responsable de los delitos de “distribución de representaciones de menores de 13 años de edad dedicados a actividades sexuales explícitas y representaciones de sus partes genitales con fines predominantemente sexuales y tenencia de representaciones de menores de 13 años de edad dedicados a actividades sexuales explícitas con fines inequívocos de distribución”.

Este caso no solo concluyó con una condena, sino que también pone de relieve la vulnerabilidad de los niños y adolescentes en el entorno digital. Las redes sociales, utilizadas a diario por millones de personas, pueden convertirse en herramientas peligrosas cuando caen en manos de individuos con fines criminales.