El juicio por la desaparición y el homicidio del abogado quilmeño Salvador Altamura, quien fue visto por última vez el 13 de julio de 2020, continuó este martes con los alegatos de los abogados que representan a los familiares de la víctima quienes pidieron prisión perpetua para el único acusado. El juicio continuará el miércoles de la semana próxima con los alegatos de los defensores del imputado.

El abogado Brian Vidal, que representa a los padres de Salvador Altamura, solicitó al Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº3 de Quilmes que condene a “prisión perpetua” a Rubén Darío Dening (55 años), tal cual había solicitado el fiscal de Juicio, Andrés Nieva Woodgate el viernes pasado, por entender que es coautor penalmente responsable del delito de “robo calificado por el empleo de llave verdadera en concurso real con homicidio por preparar, facilitar, consumar y procurar la impunidad”.

El abogado Vidal, sostuvo que “se trata de un crimen cuya motivación es económica. Dening se encontraba en una situación financiera que era delicada”, remarcó en varios tramos de su alegato que se extendió por unos 45 minutos.

“Dening es la última persona con la que estuvo Salvador Altamura y fue la última que lo vio con vida en el interior de su domicilio. Altamura fue asesinado en el galpón de Dening para desapoderarlo de determinados bienes, como su motocicleta Honda, un casco gris, su teléfono celular y las llaves de su domicilio. La situación económica de él (por Dening) no era buena. La motivación necesariamente guardaba relación con lo económico” subrayó el letrado al tiempo que aseguró que el imputado “ingresó al departamento de Salvador Altamura con la llave de él y se llevó una suma cuantiosa de dólares”.

Para Vidal, también quedó acreditado en el debate que “con posterioridad a la desaparición y muerte de Salvador Altamura, Dening comienza a realizar gastos, compra dos motos, compró celulares, se alojó en el Apart Hotel Ciudad de Quilmes”.

“A través de testigos se determinó que (Dening) estaba con problemas económicos, que su situación económica no era buena y que recurrió a su amigo (Altamura), quien le prestó dos mil dólares, y que le dijo que era la última cantidad de dinero que le prestaba. Eso generó una rispidez entre ellos”, enfatizó.

“Todo el juicio se basó en pruebas testimoniales, de imágenes y científica. Todas dan que el culpable es la misma persona, Dening. Ninguna persona dudó que era él”, expresó el abogado Vidal mientras recordaba que de acuerdo a las pruebas “antropométricas” el de las imágenes en los videos “no es Salvador Altamura y guardaría similitud con Dening”.

Luego de pedir al Tribunal que se lo condene a “prisión perpetua”, el abogado solicitó que se tome como agravantes “la traición a su amigo de más de 40 años”, y la desaparición del cuerpo de la víctima “lo que conlleva un mayor dolor para su familia”.

ALEGATO POR ZOOM

Una vez concluido el alegato de Vidal, los jueces Rubén Darío Hernández, Alejandro Portunato y Julián Busteros escucharon a la abogada Ana María Pecone que ha seguido las audiencias desde España a través de la plataforma digital Zoom. La letrada Pecone que patrocina a la hija adolescente de Salvador Altamura alegó por no más de 5 minutos en los que adhirió a los pedidos de “prisión perpetua” para el imputado Dening que realizaron el abogado Vidal y el fiscal Nieva Woodgate.

 “Lamentablemente Salvador no se encuentra para contarnos qué ocurrió, qué hizo Dening pero las pruebas hablaron por él en el debate. Dening, lejos de aclarar algunas situaciones, fueron respuestas infantiles, contradictorias y mentirosas”, manifestó para agregar que (Dening) tuvo “una conducta narcisista”, con la que pretendió “subestimarnos, a los jueces y a los abogados”.

“Es el responsable único de la muerte de Altamura que siendo amigo lo llevó a su trampa mortal. Es violento, y su testimonio fue burdo. No pudo demostrar el origen del dinero que llevaba cuando fue detenido en Entre Ríos”, acentuó Pecone.