El fiscal de Juicio pidió prisión perpetua para el acusado que era pareja de la víctima; mientras que la defensa del imputado solicitó una morigeración de pena.

Rafael Emilio Barbosa (74 años) está siendo juzgado por el asesinato de Sonia Edith Somoza (74 años), quien era su pareja cuando el 27 de julio de 2022, el cuerpo de la mujer fue encontrado flotando en la pileta de su vivienda, ubicada en Benito Pérez Galdós al 700, en Quilmes Oeste. Él mismo llamó al 911 diciendo que la encontró sin vida en la pileta y según su versión ambos habían cenado juntos y luego se habían ido a dormir y al notar horas más tarde que ella no estaba en la cama, salió a buscarla para hallarla sin vida.

Lo que en un principio parecía una muerte accidental, al avanzar la investigación la Justicia detuvo a Barbosa y lo acusó del delito de “homicidio agravado por el vínculo y por haber sido cometido contra una mujer” que tuvo como víctima a Sonia Somoza, que era la madre de Marcelo Suárez, un reconocido arquitecto y constructor de la zona quien se suicidó hace poco más de tres años mientras era investigado por una supuesta megaestafa inmobiliaria.

EL FISCAL PIDIÓ PENA MÁXIMA

Durante los alegatos de las partes, el fiscal de Juicio, Andrés Nieva Woodgate, que estuvo a cargo de la acusación, solicitó la pena de “prisión perpetua” para Barbosa. Ante los jueces del Tribunal, remarcó que el imputado reconoció haber mantenido una discusión con la víctima y que presentaba marcas de arañazos en los brazos, cuyo ADN coincidió con el hallado bajo las uñas de Sonia Somoza; al mismo tiempo enfatizó que la mujer presentaba una veintena de moretones en el cuerpo, varios de ellos en su rostro. Asimismo, mencionó que a Sonia Somoza la tiraron sin vida a la pileta porque murió por “asfixia por sofocación” y no ahogada. 

PARA LA DEFENSA, ES INHUMANO CONDENAR A UN ANCIANO A MORIR EN PRISIÓN

A su turno, la defensora oficial Lorena Iácono, planteó la inconstitucionalidad del pedido de pena a prisión perpetua, debido a que Rafael Barbosa siendo un septuagenario se verá imposibilitado de acceder a la libertad condicional que recién le correspondería superados los 100 años, argumentando que la falta de esperanza de liberación es una pena cruel, inhumana y degradante. La defensora insistió en requerir al Tribunal una condena a prisión domiciliaria, teniendo en cuenta su edad y antecedentes de salud. No obstante, el fiscal Nieva Woodgate se opuso a que se le otorgue a Barbosa beneficio alguno.

Los jueces Rubén Darío Hernández, Alejandro Portunato y Julián Busteros, que integran el Tribunal Oral Nº3, darán a conocer su veredicto el próximo lunes.