La caída 2-0 frente a Ferro Carril Oeste en Caballito no solo le impidió a Quilmes acercarse a los líderes, sino que además lo dejó inmerso en un apretado pelotón de equipos que pelean por un lugar en el Octogonal. La derrota, sumada a los resultados que se dieron en la última fecha de la Zona A de la Primera Nacional, achicó las diferencias y encendió las alarmas en el Centenario.

Con 19 puntos, el equipo dirigido por Sergio Rondina ocupa actualmente el 5º puesto, apenas un escalón por arroba de Ferro, que con 18 unidades es el último que, hasta el momento, clasifica al Reducido por el segundo ascenso. Sin embargo, la tabla muestra un escenario ajustado y repleto de incertidumbre: del 4º al 11º lugar hay ocho equipos separados por apenas dos puntos.

El pelotón apretado: ocho equipos en dos puntos

Además de Quilmes y Ferro, también se encuentran en la pelea equipos como (Los Andes, Racing de Córdoba, Deportivo Maipú) San Miguel, Patronato y Almagro, que ocupan del 9º al 11º lugar con 17 puntos. Cualquier traspié puede dejar a los de Rondina fuera de la zona de clasificación.

La tabla refleja la paridad del campeonato, que recién transita su fecha 14 de las 34 programadas. Cada fecha empieza a tener peso de final. La irregularidad es una constante en el torneo y por eso el Cervecero necesita hacerse fuerte en casa para no perder terreno.

Se viene Patronato: un duelo directo en el Centenario

El próximo compromiso para Quilmes será clave. Recibirá en el Estadio Centenario a Patronato, uno de los rivales directos en la lucha por meterse en los puestos de Reducido. Con la tabla tan apretada, un triunfo le permitirá al cervecero tomar oxígeno y evitar caer en la parte baja de la zona de clasificación.

Sergio Rondina sabe que deberá ajustar el funcionamiento del equipo, que sumó su segunda derrota seguida en el campeonato, para no resignar puntos ante un rival que llega entonado tras vencer a Racing de Córdoba.

Con 21 fechas todavía por delante, el margen es amplio, pero las urgencias empiezan a sentirse. En un torneo largo y parejo, cada punto cuenta. Y Quilmes no puede permitirse dejar pasar otra oportunidad.