El evento, celebrado en Asunción, Paraguay, reunió a las mejores selecciones juveniles de la región, y los equipos nacionales demostraron estar a la altura.

El conjunto masculino, conducido por el entrenador Rubén Busolin, se consagró campeón invicto al derrotar a Chile por 31:24 en la última fecha del torneo. Entre las figuras destacadas estuvo el arquero quilmeño Santino Canepa, quien tuvo un papel valioso defendiendo el arco argentino. Canepa, jugador de la Asociación Alemana de Cultura Física de Quilmes (A.C.C.F Quilmes), fue uno de los pilares en la sólida actuación defensiva del equipo nacional a lo largo del certamen.

Por su parte, la Selección Femenina también cerró el torneo con una sonrisa, venciendo a Chile por 25:22 y asegurando el subcampeonato. El equipo ya había garantizado la medalla de plata tras una campaña destacada, que mostró el crecimiento y el potencial de las jugadoras juveniles.

En total, Argentina concluyó su participación en el Sur-Centro con un balance más que positivo: nueve victorias en diez partidos. Este resultado mejora considerablemente la performance del año pasado, cuando el equipo masculino obtuvo la medalla de plata y el femenino se llevó el bronce. Con la medalla de oro de los varones y la plata de las mujeres, el handball argentino juvenil sigue afianzándose como una potencia en la región.

El certamen se disputó íntegramente en las instalaciones del Comité Olímpico Paraguayo, donde los jóvenes atletas argentinos demostraron su talento y compromiso en cada encuentro.