mates

El presidente de la Sala I de la Cámara de Apelaciones Civil y Comercial de Quilmes se excusó ayer de intervenir en la causa en la que se tramita la intervención judicial al club Argentino de Quilmes.

La decisión se conoció ayer miércoles, pero en realidad la determinación de su apartamiento se tomó el martes en el expediente que se tramita desde el 19 de marzo en esa instancia judicial. La Cámara deberá avalar o no la decisión judicial de intervenir el histórico club quilmeño.

Según argumentó el juez Gerardo Crichigno su condición de socio de la entidad de la barranca Nº 3.652 le impedía intervenir de manera objetiva en la discusión en torno a la pertinencia o no de la decisión judicial del juzgado Civil y Comercial Nº7 de intervenir del club Mate. El magistrado no dijo que no sólo es socio sino que también fue miembro de la Comisión Directiva del club durante la presidencia de Jorge Moltedo en 1999. Justamente, el oficialismo desplazado de la institución acusa a dirigentes de ese grupo de estar copando el club a partir de la llegada de la interventora judicial.

Finalmente, se decidió que con el apartamiento de Crichigno, la Sala I quedará integrada por los jueces Horacio Carlos Manzi y Gabriel Zapa y serán ellos los que deberán convalidar o no la intervención del Club Argentino de Quilmes, proceso que está en marcha desde los últimos días de diciembre del 2020 y se extiende, por ahora, hasta después de junio de este año.

Se recordará que el último presidente del club, Césa Sosa, fue desplazado junto con la Comisión Directiva por una decisión judicial que decretó la intervención de la entidad y designó Paola Cappolo como máxima responsable de la institución de la barranca. La funcionaria deberá ordenar administrativamente el Mate y garantizar un proceso electoral transparente para las elegir nuevas autoridades.

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