Marcelina Eleuteria Marcial tiene casi 70 años y es referente de una comunidad originaria de Jujuy. Hace ya muchos años, terminó de perder la visión durante una cirugía. Colegas oftalmólogos la derivaron y su caso fue seleccionado para ser resuelto dentro de las prácticas que ofrece esta novedosa iniciativa. Marcelina fue operada y anduvo fantásticamente bien. Volvió a caminar sola, volvió a ver: está feliz.

La experiencia empezó hace 13 años. La idea contempló un objetivo sencillo y práctico: compartir con otros colegas qué es lo que hace cada uno en su consultorio y aprender unos de otros.

Se sabe que el ser competente requiere una formación a lo largo de toda la vida, con la que los profesionales médicos tenemos que comprometernos para garantizar la adecuación de nuestros conocimientos y habilidades clínicas, aspectos que son esenciales para prestar un servicio sanitario de calidad.

La realidad es que a veces no tenemos tiempo de ver cómo trabajan otros médicos y creamos un lugar para encontrarnos y mostrar las diferentes formas de trabajo y las diversas maneras de resolver pacientes complejos. Claro está que una cosa es lo que está en los libros y otra, es la práctica.

La mejor técnica para cada caso

Los trabajos están relacionados con las cataratas, el glaucoma y problemas de retina y de córnea reflejados en pacientes pediátricos y adultos. Empresas y laboratorios ponen a disposición absolutamente todos los materiales existentes en el mercado para implementar la mejor técnica para cada caso.

Una cirugía desafiante o poco frecuente en ojos demanda que el cirujano tenga que reaccionar en pocos segundos y no todos los cirujanos reaccionamos igual. Entonces al no todos responder de la misma forma se pueden aprender nuevas maneras de razonar.

Empezamos siendo 65 médicos en Berazategui. Hoy estamos preparados para recibir 4300 asistentes, además, la participación de 10 mil personas vía streaming. En esta oportunidad, la cita de Faco Extrema es del 22 al 24 de Agosto en el Centro de Convenciones de Buenos Aires.

El impacto en la comunidad

Según la Organización Mundial de la Salud, en 2050, aproximadamente el 52% de la población será miope y costará 1.300 millones de dólares atender a toda la población con baja visión o ceguera. Estos datos impactan en el bienestar y la calidad de vida, así como en la economía, debido a la pérdida de productividad.

Si los profesionales mejoran su calidad de atención, el público en general va a ser beneficiado también. Se trata de forma indirecta, de mejorar nuestra práctica, nuestra capacidad y calidad de atención.